“¿No se puede dar el pecho si tengo coronavirus?”

¿Es esto verdad?

Es importante saber que esto no es cierto.

La lactancia protege de las enfermedades respiratorias y de que se compliquen. 

Los coronavirus son una familia de virus que provocan infecciones de tipo respiratorio en animales y humanos. Lo más frecuente es que causen un resfriado leve con tos, mucosidad nasal, dolor de garganta, fiebre y dificultad respiratoria leve.

Algunas cepas de coronavirus que han mutado recientemente de algún animal al hombre son más agresivas y pueden causar problemas respiratorios graves. Las personas de edad avanzada y las que tienen enfermedades crónicas tienen mayor riesgo de presentar síntomas graves. La mayoría de niños, incluidos los recién nacidos, padecen una enfermedad leve o son asintomáticos

Se han encontrado anticuerpo específicos contra el coronavirus en leche materna y partículas de RNA del virus no viable ni transmissible. No hay casos documentados de contagio al lactante a través de la leche materna.

La Academia Americana de Pediatría apoya la lactancia materna como la mejor opción de alimentación para recién nacidos y lactantes incluso en madres afectas de CoViD-19.

La madre positiva a COVID-19 debe usar una máscarilla médica cuando esté cerca de su bebé y lavarse bien las manos antes de un contacto cercano.

Si la madre está muy enferma para amamantar, conviene que se extraiga leche para evitar problemas de congestión mamaria. Esta leche puede tomarla el lactante.