Mi hijo babea

¿Qué es el babeo?

El babeo es la salida INVOLUNTARIA de la saliva por la boca.

Se produce por dos motivos: por un aumento en la producción de saliva (hipersialia) o por una incapacidad para retener la saliva dentro de la boca.

Un niño produce entre 1-1,5 litros de saliva diaria. Mientras que un adulto traga aproximadamente 1 vez por minuto estando despierto, no se conoce la frecuencia de tragado en un niño.

¿Cuáles son sus causas?

El babeo es común desde los 2-3 meses de edad. Es un signo que suele asociarse a la aparición de los primeros dientes.

Tiende a desaparecer en torno a los 15-18 meses como consecuencia de la maduración oral del niño, aunque en ocasiones, puede extenderse hasta los 3 años y ser normal.

Sin duda, será anormal más allá de los 4 años siendo más frecuente en casos de retraso mental o parálisis cerebral.

Cuando el babeo aparece de forma brusca, con o sin fiebre, puede ser debido a infecciones de la boca o de la garganta.

Otras causas como medicamentos, reflujo gastroesofágico, obstrucciones esofágicas, cuerpos extraños,… son más raras en niños.

¿Cuándo hay que consultar?

No suele ser necesario consultar.

Puede producir alguna irritación en la zona de la cara o el cuello como consecuencia de la humedad y necesitar algún tratamiento específico.

En niños preescolares neurológicamente sanos, el babeo puede conducir a cierta vergüenza social. La gravedad se puede medir por la necesidad continua de secar la baba o por el cambio de ropa frecuente, pudiendo necesitar valoración por un especialista.

Si aparece de forma brusca, junto con síntomas preocupantes como fiebre, dolor al tragar o dificultad para respirar, el pediatra debe buscar la causa.