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Padres y pediatras
al cuidado de la infancia y la adolescencia

Las vacunas que reciben los niños, ¿son demasiadas?

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Fecha de publicación: 13-11-2013

En el calendario de vacunación de la Asociación Española de Pediatría se recomienda la administración  de vacunas que protegen a los niños de 20 enfermedades diferentes. Muchas de ellas necesitan además de varias dosis para lograr una correcta inmunización, aumentando así el número de vacunas administradas.

Por otra parte, la mayoría se ponen a bebés y en muchas ocasiones éstos reciben varias vacunas juntas en la misma visita, lo que puede llevar a los padres a preguntarse si sus hijos no reciben demasiadas vacunas y si juntar varias de ellas o ponerlas tan pronto no supone un riesgo para su salud.

¿Por qué se recomienda que los niños reciban tantas vacunas? ¿Por qué se vacuna a los niños a tan corta edad?

Las vacunas son la mejor defensa frente a enfermedades que pueden causar complicaciones graves e, incluso, la muerte en la infancia y también en la edad adulta.

¿Por qué se vacuna a los niños a tan corta edad?

Esto es fundamental. Los bebés son más vulnerables a ciertas enfermedades y las vacunas les proporcionan la inmunidad necesaria antes de que estén expuestos a ellas.

Los recién nacidos están protegidos frente a algunas enfermedades gracias a los anticuerpos que tiene la madre y que les son transferidos antes de nacer, pero esta inmunidad dura sólo unos pocos meses y luego tienen que ser vacunados para estar protegidos.

Aunque estadísticamente son bajas las probabilidades de que los niños contraigan algunas de las enfermedades que se pueden prevenir con las vacunas, es imprescindible que no les falte la protección que las vacunas proporcionan si alguna vez la necesitan.

Cuando se habla de vacunas combinadas y vacunas simultáneas, ¿qué significa?

Cuando se administran varias vacunas al mismo tiempo, éstas pueden ser:

a) Combinadas: son varias vacunas en un mismo preparado. Se administran juntas en una sola inyección. Ejemplos de estas vacunas son la Hexavalente (difteria, tétanos, tos ferina, hepatitis B, Haemophilus Influenzae tipo b y polio) o la Triple Vírica (sarampión, paperas, rubeola).

­ b) Simultáneas: Son varias vacunas en preparados diferentes que se administran por separado en una misma visita y en puntos de inyección distintos o por vías diferentes. Un ejemplo es la administración de la vacuna hexavalente en un muslo,  la del neumococo en el otro muslo y la del rotavirus por vía oral..

¿Por qué se ponen varias vacunas juntas?

El motivo principal de poner varias vacunas a la vez es proteger al niño lo antes posible.

Existen otras circunstancias en que poner varias vacunas juntas tiene especial importancia: cuando se va a hacer un viajes o si hay que administrar vacunas atrasadas.

En el caso de las vacunas combinadas, al poner varias vacunas juntas reducimos el número de inyecciones por lo que evitamos molestias al niño.

Cuando se administran varias vacunas simultáneas también evitamos molestias al niño ya que se ha visto que el estrés que sufre el niño es similar cuando se pone una sola inyección o varias.

Otra ventaja es que así se reducen las visitas, lo que supone un ahorro de tiempo a los padres y un menor coste económico.

¿La administración de varias vacunas a la vez puede sobrecargar el sistema inmunitario?

No. Las vacunas que se administran a los niños no sobrecargan ni debilitan su sistema inmunitario.

Desde que nacen, los niños están en contacto con muchos virus y bacterias. El aire que respiran y los alimentos que ingieren y los objetos que tocan, contienen gérmenes y el sistema inmunitario responde a ellos sin problemas. El reto inmunitario que suponen las vacunas es muy pequeño en comparación con este reto inmunitario con el que se encuentran los niños en su entorno todos los días.

Las vacunas, a diferencia de la infección natural, contienen sólo el componente activo (antígeno)  que genera la respuesta inmunitaria, o las instrucciones para producir ese componente activo. El antígeno puede ser una pequeña parte del organismo causante de la enfermedad o una versión inactivada o atenuada del mismo, de manera que con la vacuna el cuerpo aprende a defenderse de ese organismo sin enfermar.

Las vacunas fortalecen el sistema inmunitario del niño porque estimulan la producción de anticuerpos y de células de memoria, que hacen que si el niño se expone a un germen peligroso en el futuro, su sistema inmunitario podrá responder con mayor rapidez y con mayor intensidad para protegerlo contra la enfermedad.

Como dato curioso, los estudios de Tonegawa (inmunólogo que ganó el Premio Nobel de Medicina en 1987 por el descubrimiento de cómo se generan los anticuerpos) permiten concluir que los niños podrían responder eficazmente a cerca de 100,000 vacunas a la vez.

¿Es segura la administración de varias vacunas a la vez?

Si. Cuando se administran varias vacunas a la vez el sistema inmunitario responde de forma segura y eficaz a todas ellas.

Antes de que una vacuna sea aprobada, se hacen estudios cuyo objetivo es asegurar que es igual de segura y efectiva si se administra sola o en combinación o simultáneamente con otras vacunas.

Por otra parte, aunque los niños reciban varias vacunas juntas, el número de antígenos a los que se exponen es mucho menor que en el pasado. Los avances científicos han permitido fabricar vacunas cada vez más purificadas y seguras, de manera que hoy en día las vacunas protegen contra más enfermedades usando menos antígenos.

¿Todas las vacunas pueden ponerse juntas?

Las vacunas que habitualmente reciben los niños pueden ponerse juntas, siempre que se tenga en cuenta la edad de administración y los intervalos entre las diferentes dosis de cada vacuna por separado.

¿No sería más seguro espaciar varios días la administración de las diferentes vacunas?

Aunque podemos poner las vacunas por separado y espaciarlas varios días entre ellas, es más seguro ponerlas juntas ya que, si no lo hacemos así, habría que tener en cuenta qué vacunas vamos a poner cada vez y cuándo las vamos a poner.

Algunas vacunas, como las inactivadas, pueden ponerse en cualquier momento, antes o después de otra vacuna, sin tener en cuenta el tiempo transcurrido entre una y otra; pero hay otras, como las de virus vivos atenuados, que deben ponerse con un intervalo mínimo entre ellas de 4 semanas para no disminuir la respuesta inmunitaria. Por lo tanto, es más seguro ponerlas juntas, cuando esté indicado de esta manera en el calendario vacunal.

Poner las vacunas por separado puede hacer que se retrase o se tenga que retrasar el momento de poner alguna vacuna, lo que también retrasará el momento en el que el niño está protegido

Fecha de publicación: 13-11-2013
Última fecha de actualización: 17-05-2022
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