Desde antes de nacer podemos saber si nuestro bebé puede tener hidronefrosis, otras veces se detecta después. Lo sabemos gracias a las ecografías. La hidronefrosis puede tener distinta gravedad, de lo que dependerá su manejo.
Algunos bebés nacen con alguna problema de los riñones. La mayoría son alteraciones sin ninguna repercusión para el niño. A veces deben controlarse por especialistas. Infórmate sobre este tema en este artículo.