Está demostrado científicamente, que en los primeros años de vida, el cerebro del niño absorbe más fácilmente todos los aprendizajes. Por tanto, cualquier intervención temprana será fundamental en su desarrollo.
Los signos de alarma de los trastornos del espectro autista se pueden reconocer por los docentes. La escuela juega un papel principal en el reconocimiento del autismo y su terapia.
Las preocupaciones de los padres sobre el desarrollo de su hijo deben considerarse siempre. Los educadores también deben conocer los signos que nos deben alarmar. ¡Siempre que existan dudas, hay que consultar con vuestro pediatra!
¿Tiene vuestro hijo algún retraso en su desarrollo? ¿No ha empezado a andar cuando debía? ¿O es el lenguaje lo que no marcha? Quizá sean pequeñas cosas las que nos preocupan, o quizá sean mas importantes. Hay algunas medidas que podrán mejorar la evolución de estos problemas.
Si sospechamos que nuestro hijo sufre un autismo debemos solicitar ayuda a un profesional. El niño va a necesitar una valoración y tratamiento por varios profesionales especializados. En este artículo os explicamos brevemente qué es un autismo y os damos algunos recursos que os servirán de ayuda.