"¿Los dientes duelen?"

Y la realidad es que:

Los estudios demuestran que la erupción dental no produce fiebre, irritabilidad, babeo, diarrea o infecciones respiratorias.

A partir de los 6 meses y durante el resto de la infancia, los dientes van erupcionando de forma progresiva  y los niños no se suelen quejar. De hecho, muchas veces los padres se sorprenden al encontrarse dientes nuevos en la boca de sus hijos. Los dientes definitivos aparecen a partir de los 5-6 años y son más grandes que los temporales. En lógica su erupción debería ser más dolorosa. Los niños de esa edad ya saben decirnos si les duele algo y no se suelen quejar.

El babeo en los niños aparece a los 3-4 meses cuando la glándula parótida madura. La erupción dental es cercana en el tiempo a la aparición del babeo. También a esa edad los niños suelen meterse la mano en la boca o llevarse a la boca las cosas que son capaces de coger. Son hitos del desarrollo del niño. Pero se meten la mano en la boca no porque les duelan las encías, sino porque toca que lo hagan.

A su vez el hecho de meterse cosas en la boca en un momento en que la lactancia materna empieza a ser menos intensa facilita la aparición de infecciones. Estas infecciones pueden producir fiebre, diarrea, dolor faríngeo, etc.... La causa de esos síntomas es una infección, no la erupción dental.

Es decir, la erupción dental puede coincidir en el tiempo con síntomas y enfermedades, pero no es la causa de ellas.