Formulario de búsqueda

Padres y pediatras
al cuidado de la infancia y la adolescencia

CVL 11 Años, (M) Castellón

A veces los chic@s aventajan a los mayores en darse cuenta de las cosas positivas que tienen las situaciones difíciles. Y esto es lo que esta chica de 11 años hace. Nos da una lección a todos. 

Lée su relato aquí.

COMO HE VIVIDO YO EL CONFINAMIENTO

Todo empezó el 14 de marzo de 2.020, cuando dijeron que había estado de alarma. Yo no había escuchado nunca la palabra confinamiento hasta que llegó ese día. Todo era muy raro, ya que mis padres estaban muy preocupados en escuchar todo lo que se decía en la tele, nos explicaron que había un virus que se iba transmitiendo de una persona  a otra y era muy contagioso, sobre todo afectaba a las personas mayores y que había que tener mucho cuidado, lavarse mucho las manos y estar a cierta distancia de la gente para no contagiarse.

Mi hermana y yo aún con la explicación de mis padres, no sabíamos muy bien lo que pasaba, decían que no íbamos a poder ir al cole, que no íbamos a poder salir a la calle, era todo muy extraño, pero tampoco le dimos más importancia, ya que lo único que nos pedían era que  no quedáramos en casa y yo aquí me siento muy segura.

Llegó el lunes 16 de marzo, y efectivamente no fuimos al cole, mis padres hacían lista de la compra como locos porque no sabían que iba a pasar, se decía que no se podía salir a la calle, aunque a pasear a nuestros perros sí, pero daba la sensación de que no iba con nosotras, ya que eran como unas vacaciones.

Los días pasaron y hoy hace ya un mes y tres días que estamos confinados, parece que los nervios y la tensión que había en mi casa se han frenado un poco, porque al principio mi madre salía a trabajar preocupada y decía enfadada que era esencial, y mi padre preocupado también porque no podía abrir la peluquería.

Evidentemente mi hermana y yo, todo esto no lo hemos vivido con la preocupación y los nervios con los que lo viven los mayores, ya que hay cosas que nos cuesta entender y mis padres nos explican muchas cosas pero hay otras que se las ahorran para no preocuparnos, lo que todo el mundo pedía era “QUÉDATE EN CASA”.

Lo que sí que puedo decir es que todo esto me ha servido para estar aún más cerca de mi hermana, ya que antes discutíamos un poco, la mayoría de las veces por tonterías y ahora somos una piña, hacemos un montón de manualidades juntas, pintamos, bailamos, cocinamos y sobre todo estoy pasando muchísimo tiempo con mis padres, sobre todo con mi padre que antes por horarios de trabajo nos era imposible.

No tengo necesidad o agobio por salir a la calle, la verdad, nos lo hemos tomado como tiempo para disfrutar de todo lo que antes no podíamos, solo espero que esto pase sin afectar a nadie de mi familia y algún día próximo poder volver a salir por Sopeña con mis amigas o incluso invitarlas a mi casa a merendar, ya que son ese tipo de cosas que si que hecho un poco de menos.