Artritis idiopática juvenil

Artritis es la palabra que se usa para hablar de la inflamación de las articulaciones. De este modo sienten hinchadas, calientes, rojas y a veces rígidas o con dolor, por lo que no nos dejan mover como siempre.

Las articulaciones se pueden inflamar por varias causas, la más común son los golpes.

Pero otras veces puede pasar que, sin una causa, una o varias articulaciones se inflamen un tiempo largo o también que el niño tenga otros síntomas. Si se cumplen una serie de criterios puede que el niño tenga una Artritis Idiopática Juvenil.

¿Pero, qué quiere decir ese término?

Ante todo decir que se trata de una enfermedad que se puede dar de varias formas, con diferente gravedad, pronóstico, evolución y que quizá nuestro médico las trate de distinto modo.

Para poder diagnosticarla es necesario que perdure al menos 6 semanas. Y solo después de 6 meses se podrá incluir en uno u otro tipo.

Es una enfermedad “autoinmune”. Nuestro propio sistema inmune reconoce por error, lo propio como extraño y lucha por destruirlo.

¿Y por qué ocurre?

No se conoce por qué nuestras defensas se vuelven locas y reaccionan frente a nuestros propios tejidos. A veces influye nuestra genética, factores ambientales, como haber tenido previamente una infección…Cuando los médicos no tenemos claro por qué ocurren las cosas les llamamos idiopáticas.

¿Cuáles son los principales tipos?

-Artritis sistémica. Sistémica quiere decir que afecta a varios órganos o sistemas del cuerpo. Puede aparecer en cualquier momento entre los 1 y 16 años. Es común tanto en niños como en niñas. También causa fiebre que aparece a la misma hora del día y sarpullido.

-Poliartritis o artritis poliarticular. Afecta a más de 5 articulaciones en los primeros 6 meses de la enfermedad. Es más frecuente en niñas.

-Oligoartritis o artritis pauciarticular. Es el tipo más común (más de la mitad de los casos serán así). Afecta a menos de 5 articulaciones en los primeros 6 meses. Es más común también en niñas, y suele empezar entre los 2 y 3 años.

-Artritis relacionada con entesitis. Entesitis es la inflamación de la zona en que los tendones o ligamentos se unen al hueso. Se da más en niños que en niñas. Aparece un poco más tarde en la infancia y suele afectar a la pierna y espalda.

-Artritis psoriásica. La psoriasis es una enfermedad de la piel que cursa con un tipo de sarpullido especial (costras secas blancas) y cambios en las uñas. Puede que los dedos de manos o pies se inflamen como salchichas (dactilitis). Cuando asocia artritis se habla de este subtipo. Es más común en niñas.

¿Qué articulaciones se afectan?

Depende del tipo de artritis que tenga el niño. Muchos tipos afectan a las muñecas, rodillas, tobillos, caderas. Pero también puede afectarse la espalda o incluso la mandíbula.

A veces se afecta la misma articulación en ambos lados del cuerpo. En ocasiones por la mañana las articulaciones aparecen más rígidas e hinchadas y van mejorando a lo largo del día.

Ojos enrojecidos. Algunos tipos de artritis asocian ojos enrojecidos. No suele doler, pero es importante en estos casos consultar con un oftalmólogo que debe descartar una uveítis anterior, proceso que puede ser grave.

¿Cuándo debo consultar?

Si su hijo tiene una articulación rígida, hinchada o dolorida, sobre todo si no existe causa aparente o perdura en el tiempo debe consultar con su pediatra.

¿Cómo se trata?

Medicinas: pueden ser de dos tipos. Antiinflamatorios (ibuprofeno, naproxeno… o a veces corticoides), o bien medicamentos más nuevos y que se llaman anti-reumáticos modificadores de la enfermedad. De estos, los más modernos son los fármacos biológicos que vienen a ser medicamentos que tratan el origen inmunitario alterado de la enfermedad. A veces se dan en forma de jarabe, con inyecciones debajo de la piel o por vía intravenosa (tubo delgado que se pone en una vena).

Los médicos que llevan esta enfermedad suelen ser reumatólogos. Ellos pueden recomendarnos ver a un fisioterapeuta, oftalmólogo o también un traumatólogo si los problemas articulares causan que una pierna o brazo crezca más en un lado que en otro.