Mi hijo se ha dado un golpe en el ojo: erosiones y úlceras corneales

Las lesiones en el ojo se pueden producir por un golpe, arañazo, pinchazo, salpicadura, porque algún objeto se meta dentro del ojo o por uso de lentes de contacto. Esto puede dar lugar a daño en la parte más expuesta del ojo, la córnea (lo que está por delante de la parte coloreada del ojo), causando erosiones y úlceras corneales.

¿Cómo se manifiesta?

Cuando se recibe un golpe en el ojo, como un puñetazo o con una pelota, los párpados se hinchan y luego se ponen morados. El color morado se debe a la sangre que queda bajo la piel y en unos días cambia a color verde y luego amarillento. El color que no es normal suele tardar unos 15 días en desaparecer.

Cuando nos arañamos el ojo (con una rama, la uña o el canto de un folio) o bien cuando se nos mete algo dentro del ojo (polvo, arena, carbonilla, una pestaña, un insecto), suele haber dolor o escozor fuerte en el ojo, lagrimeo, la parte blanca del ojo se pone roja y hay dificultad para abrir los párpados. A veces hay una hemorragia, como una sábana, en la parte blanca del ojo.

¿Qué es lo primero que debo hacer?

- Si se recibe un golpe, como un pelotazo o un puñetazo, poner una bolsa con hielo dentro de un pañuelo sobre la zona inflamada, sin apretar. Después ir a un centro sanitario.

- Si ha salpicado algo (una sustancia química, aceite, lejía…) o se ha metido algo dentro del ojo, lo primero es lavarnos las manos antes de tocar el ojo. Tras ello hay que enjuagar el ojo lo antes posible, de manera continuada y durante 15 minutos, comprobando cada 5 minutos si se ha arrastrado el objeto extraño y ha salido del ojo. Lo ideal es utilizar suero fisiológico a chorro, pero, si no se dispone de él, puede lavarse con un chorro agua templada en el lavabo, manteniendo el ojo abierto y orientado hacia abajo debajo del grifo.

No hay que frotar ni comprimir el ojo. Si se trata de un niño, hay que intentar evitar que se lo toque.

¿Qué pruebas harán para diagnosticar la lesión?

Se debe comprobar si hay alguna lesión en la córnea. Para ello se ponen en el ojo unas gotas o un papel con una sustancia que tiñe la lesión de color fosforito, y se explora el ojo con una luz especial.

Según la gravedad de la lesión puede ser que se derive al oftalmólogo.

¿Cuándo debo consultar con el pediatra?

- Si se trata de un golpe fuerte o un arañazo hay que consultar con el pediatra lo antes posible. Una herida en el párpado siempre debe ser valorada por un oftalmólogo para suturarla y, en este caso, hay que acudir inmediatamente a un centro hospitalario.

- El ojo a menudo se limpia de pequeños objetos, como pestañas o arena, con el pestañeo o el lagrimeo. Si ocurre así o los restos salen tras el lavado con agua o suero fisiológico y con ello las molestias desaparecen y el ojo se queda normal, se puede observar en casa.

Siempre se debe acudir a un centro sanitario en caso de:

- Aumento del enrojecimiento del ojo

- Supuración

- Dolor que no calma 

- Cualquier cambio en la visión

- Cualquier cambio visible en el globo ocular

- Sangre visible en la parte blanca del ojo (esclerótica), en especial cerca de la córnea

¿Qué consecuencias puede tener?

Depende del tipo de lesión.

- Una erosión superficial en la parte blanca del ojo, aunque puede ser muy aparatosa, muchas veces se cura sola sin tratamiento.

- Si hay una erosión superficial en la córnea, es probable que el médico indique un colirio o pomada antibiótica y con ello seguramente se curará sin complicaciones.

- Las lesiones penetrantes, los golpes fuertes y las quemaduras químicas pueden producir complicaciones muy graves, como la pérdida de visión, y requieren un tratamiento individualizado y urgente por parte del oftalmólogo. 

¿Cómo prevenir estas lesiones en el ojo?

En muchos casos no podremos prevenirlas, pero el riesgo puede reducirse tomando algunas medidas, como las siguientes:

• Los niños que hacen deporte deben llevar gafas protectoras o gafas irrompibles si las necesitan.
• Guardar las sustancias químicas u otros objetos peligrosos fuera del alcance de los niños.
• Si se usan lentes de contacto:
  • Lavado de manos siempre que las vayamos a tocar.
  • Respetar el tiempo máximo de uso y la fecha de caducidad.
  • No usar lentes de contacto para bañarse en el agua (piscinas, mar…).
  • Lavar las lentes con las soluciones especiales para ello, nunca con agua potable, saliva u otros líquidos.

Si durante el uso de lentes de contacto sentimos algún síntoma de los anteriormente expuestos, hay que consultar con un centro sanitario.

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