El asma ¿cuándo debo ir a un servicio de urgencias?

Cuando comienza una crisis de asma lo más importante es iniciar el tratamiento lo antes posible. Si tengo asma, hay tres cosas que debo saber:

1. Lo primero es saber identificar pronto los síntomas de asma.  También, cuando el control de la enfermedad es peor.
2. Es bueno tener un plan de acción por escrito.  Te dice cómo actuar si te pones peor o tienes una crisis de asma. Pídeselo a tu médico.
3. Por último, saber cuándo se debe consultar al médico.

Reconocer la crisis ¿Tengo una crisis?

Una crisis de asma es cuando te encuentras peor de los síntomas de asma. Puede empezar de forma brusca o poco a poco. Con frecuencia se nota dificultad para respirar:

• Toso bastante
• Tengo pitos
• Tengo fatiga, que es la dificultad para respirar
• Jadeo, que es la respiración acelerada o se me hunden los espacios entre las costillas, el esternón o las clavículas
• Noto presión o dolor en el pecho

Hay que actuar inmediatamente ¿Tengo un plan de acción por escrito?

Es bueno tener un plan de acción por escrito como guía para las crisis. Se deben seguir las indicaciones de dicho plan:

- Si tengo una crisis, empiezo muy pronto con el tratamiento de rescate que es el broncodilatador. Si mejoro, lo sigo usando. Y después, pediré una cita con mi pediatra.

- Si no mejoro, tendré que repetir el tratamiento broncodilatador: 4-6 puff (3 tandas cada 20 minutos en una hora, si fuera preciso). Si mejoro, seguiré con el tratamiento a demanda. Y pediré una cita con mi pediatra en las próximas 24 horas.

Si hay empeoramiento o escasa mejoría ¿Hay que ir al servicio de urgencias?

Si después de seguir este plan durante unas 2-3 horas no notas mucha mejoría y sigues con dificultad para respirar lo mejor es ir a Urgencias.

¿Cuáles son los signos de alarma y los factores de riesgo para una crisis grave?

Hay que saber también cuáles son los signos de alarma y los factores de riesgo, que deben hacer que vayas a un servicio de urgencias sin tardar. 

Signos de alarma (síntomas de una crisis grave):

• Uñas y/o labios grises o azules debido a la falta de oxígeno en la sangre.
• Se oyen “pitos” con claridad.
• Parece que estás como dormido, muy irritable o apenas puede hablar o caminar.
• En la base del cuello, encima de las clavículas y entre las costillas, la piel se hunde con la respiración.
• Las alas de la nariz se mueven al respirar.
• Dificultad para respirar, aunque esté sentado o sin moverme.
• Aumenta el número de respiraciones por minuto.
• La espiración (expulsión del aire) es más lenta y con dificultad
• La frecuencia cardiaca y el pulso son mucho más rápidos.
• Los medicamentos no mejoran los síntomas o reaparecen tras 5-10 minutos.

​ Factores de riesgo (antecedentes considerados de riesgo):

• Estuve en el hospital ingresado hace menos de un mes.
• En el último año:
  • Uno o más ingresos en el hospital por asma
  • Tres o más consultas de urgencia por asma
• Ingreso anterior en una unidad de cuidados intensivos.
• Intubación previa o ventilación mecánica.
• Uso actual o reciente de corticoides orales.
• Uso excesivo de broncodilatadores de acción corta.
• Tener una enfermedad psiquiátrica o problemas psicosociales.
• Pobre adherencia al tratamiento de mantenimiento.
• Alergia a alimentos si se tiene asma.

En las crisis leves que mejoran con el tratamiento no hace falta ir a urgencias.

Las consultas repetidas a urgencias alteran la vida del niño y de la familia. Si eso pasa se piensa que hay un mal conocimiento del manejo de la enfermedad y un mal control. 

Para no tener que ir a urgencias no te olvides de evitar los desencadenantes, tener a mano la medicación de rescate (broncodilatador) y tomar la medicación de control si te lo han indicado.

Descárgate la presentación con los PUNTOS CLAVE: