Formulario de búsqueda

Padres y pediatras
al cuidado de la infancia y la adolescencia

Supositorios

  • pdf
  • friend
  • print
  • Googleplus
  • Twitter
  • Facebook
  • WhatsApp
Fecha de publicación: 28-03-2013

¿Qué son?

Los supositorios son una forma de presentación de las medicinas, igual que hay cápsulas, jarabes, pomadas, inyectables, etc. Se introducen en el cuerpo por vía rectal, es decir, por el ano.

Se usan poco, ya que no se puede asegurar la cantidad de medicamento que va a llegar al organismo. Por otro lado, su administración es incómoda y a veces molesta. Esto hace que cada vez haya menos medicinas por esta vía.

Están hechos de grasa vegetal sólida. Dentro de ésta va el medicamento. Una vez se mete en el recto, se disuelve poco a poco. La medicina se libera, se absorbe y pasa a la sangre.

¿Cuándo se deben usar?

Se pueden usar para actuar en el recto de forma directa (por ejemplo, como laxante). También para dar un medicamento cuando no se puede por la boca (vómitos, problemas al tragar, falta de colaboración, etc.). Lo más común es para dar un antitérmico a un niño con vómitos o que se niega a tomar nada por la boca.

Ya no hay antibióticos en forma de supositorios.

¿Cómo se ponen los supositorios?

A veces, después de poner un supositorio a un niño, se sale otra vez del recto. Habrá que ponerlo de nuevo. Puede que haya que desecharlo y usar uno nuevo. Esto se debe a un error en la "técnica de aplicación". La mejor forma es la siguiente:

Aunque pueda chocar, la forma mejor NO es la que nos indica el sentido común. Es decir, introducirlos en el ano por la punta. Lo correcto es empezar por el extremo plano. Esto facilita que se quede en el recto. Así, cuando el ano se contrae, el supositorio se mete hacia adentro y no se sale.

Lo mejor sería que los supositorios acabasen en punta por los dos lados.

Las manos se deben lavar antes y después de su aplicación.

¿Cómo se almacenan?

Se deben guardar en un sitio fresco donde no les dé la luz. No hace falta que estén en la nevera. En cualquier caso, se deben seguir las instrucciones del fabricante. Hay que mirar la fecha de caducidad antes de su aplicación.

    Autores del texto original: 

 

Fecha de publicación: 28-03-2013
Última fecha de actualización: 06-06-19
Autor/es: