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Las vacunas y la fiebre

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Fecha de publicación: 25-04-2016

¿Por qué las vacunas pueden dar fiebre?

Las vacunas son medicamentos que estimulan las defensas (la inmunidad) enseñándonos a defendernos contra las infecciones. Buscan que reaccionemos. Por eso a veces pueden dar fiebre como reacción a la vacunación. Se debe a la activación del sistema inmunológico.

¿La fiebre después de la vacunación significa algo malo?

Tener fiebre tras la vacunación no quiere decir que el medicamento no haya hecho bien su trabajo o que lo haya hecho mal. Al contrario. En cierta forma confirma la respuesta del organismo, aunque sea molesta.

La fiebre en sí no es dañina. Ni la que se debe a infecciones ni a las vacunas. A veces en niños predispuestos puede desencadenar una convulsión febril.

¿Si no se tiene fiebre quiere decir que no ha “prendido” la vacuna?

No. Tampoco hay que pensar que es necesario o conveniente tener fiebre para que la vacuna sea más eficaz. Hoy en día, con la mejora de los métodos de fabricación de las vacunas, cada vez hay menos reacciones febriles tras la vacunación.

¿Por qué unas vacunas pueden dar fiebre en los primeros días y otras al cabo de una o dos semanas?

La mayor parte de las vacunas, cuando causan fiebre, lo hacen en las primeras 48-72 horas tras su administración. Son las vacunas que contienen partes seleccionadas de los microbios. Estas partes provocan inmunidad, pero nunca enfermedad, pues no son gérmenes vivos. Además, contienen potenciadores de la respuesta inmunológica (adyuvantes) que también pueden producir reacciones.

Las vacunas vivas, si dan fiebre, lo hacen pasados unos días. Reflejan una leve infección benigna producida por el microbio debilitado que contienen. Este tipo de vacunas son la triple vírica (sarampión, rubeola y paperas), la de la varicela, la combinada de las dos anteriores o tetravírica y la oral del rotavirus.

¿Si hay reacción en el sitio de la inyección es más frecuente tener también fiebre?

No hay relación entre las reacciones locales (hinchazón, dolor, o enrojecimiento) y las generales (fiebre, malestar, etc.) que puede producir una vacunación. Unas veces, la mayoría, no hay ninguna reacción. Otras, puede aparecer cualquiera de ellas o bien las dos.

¿Qué hay que hacer si aparece fiebre después de vacunar?

Si hay fiebre tras la vacunación y al niño se le nota molesto, se le puede dar un analgésico-antitérmico del tipo del paracetamol o el ibuprofeno.

¿Qué es mejor, dar un antitérmico por adelantado o solo si se tiene fiebre?

Como norma general no se recomienda dar por adelantado un antitérmico para prevenir la fiebre tras la vacunación. Es mejor usar estos medicamentos solo si son necesarios.

En el caso de la vacuna contra la meningitis B (Bexsero®), si se administra al mismo tiempo que otras vacunas, en niños pequeños, algunos recomiendan dar un antitérmico, aunque otros piensan que no es necesario.

¿Cuándo debo ir al pediatra en un niño febril después de recibir una vacuna?

Muchas veces la fiebre que se detecta después de una vacunación no se debe a la propia vacuna, sino por una infección que ha coincidido en ese momento.

Si se notan signos que puedan hacer sospechar otra causa, como tos, diarrea, erupciones en la piel, etc., y si son preocupantes se debe consultar al pediatra para que lo valore. También si la fiebre dura más de dos días es poco probable que se deba a la vacunación. 

Fecha de publicación: 25-04-2016
Última fecha de actualización: 29-01-2023
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